Son muchos los factores los que hacen que la expareja no se quiera ir de la casa definitivamente. En este escenario es bastante común de exparejas que aun separados pretenden seguir con el control sobre la casa, agrediendo a su ex pareja y abusando de ellas.
En el siguiente caso que nos cuenta el abogado y especialista en Seguridad Ciudadana, Francisco Quintero, una mujer desesperada que acudió en busca de ayuda, por los hechos que ocurrieron el día sábado 7 de agosto, aproximadamente a las 8:30 de la noche:
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«Estaba trabajando y llegue a mi casa a las ocho y media, en ese momento me percate que mi ex pareja estaba dentro y no me habría la puerta al cabo de unos minutos me abrió la puerta yo me enfurecí y le reclame por otra mujer que estaba con él en la casa, respondiéndome con una patada e impactándome en de la rodilla izquierda, luego entro mi hija de 19 años y empecé a discutir con mi ex pareja, en ese momento me insultó diciéndome vete de esta mierda, no tienes casa, vecerra no te quiero más aquí. Me lanzó como tres puñetazos».
Los especialistas recomiendan este caso o similares, que la ruptura sea realmente definitiva, que no tenga llaves de la casa, no permitirle visitas ni reparaciones en el inmueble, todos estos actos si se llegaren a permitírseles serian negativos para la mujer, ya que esta persona se sigue creyendo con derechos. Ser radical es la consigna.
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